Hay días que me levanto absurdo.
Hoy debe ser uno de ellos.
El pensamiento que se me ha metido en la cabeza esta mañana es de lo más tonto.
¿Porqué los principales productores de alfombras están en lugares asfixiantemente cálidos?
Se me ha ocurrido mientras veía aún envuelta la alfombra que el viernes trajeron de la tintorería.
Seguro que en google hay una respuesta adecuada a esa pregunta.
Hay otras preguntas que se hace el empresario de forma más habitual y que son menos absurdas.
¿Por qué el trabajador no sigue las simples instrucciones que le damos?
¿Por qué se olvida de fichar una y otra vez?
¿Qué tengo que hacer para que no se entretengan tanto en el almacén antes de salir a trabajar?
¿Por qué no apunta los pedidos?
¿Por qué le tengo que perseguir todo el día para asegurarme que las tareas se hagan?
Cada retraso, cada error en la empresa supone tiempo y dinero.
A veces mucho.
A veces poco.
Pero tiempo y dinero se escapan cada día de la empresa.
Para no volver.
Hay formas de ponerle remedio.
Puedes preguntar a Google.
Puedes leer libros o acudir a cursos.
Puedes seguir haciendo lo mismo y esperar que todo cambie.
Pero si quieres cambios permanentes, conozco un camino rápido y eficaz:
PROGRAMA DE DESARROLLO EMPRESARIAL
PD: Te acompañamos para minimizar esos errores.
PPD: No solo te decimos el QUÉ hacer en esos casos, también el CÓMO y el POR QUÉ.
Practicando y entendiendo por qué se hacen las cosas es la mejor manera de evitar que el tiempo y el dinero se escapen de la empresa permanentemente.